sábado, 28 de febrero de 2015

MOJE DE ESPÁRRAGOS


Hay recetas de esas que escuchas en alguna espera en el supermercado, que vagamente recuerdas y que luego quieres interpretar a tu manera. Algunas te llegan por la vista, cuando ves una foto e imaginas cómo tiene que saber y deduces que te gustará e inventas cómo llegar a ella. Otras también te cuentan; de eso que preguntas ¿qué vas a comer hoy? y te dicen: Moje de espárragos! Y te suena muy bien...

Así me sonó cuando Antonio me lo comentó, casi sin venir a cuento. Él es hombre de cocina antigua, y de vez en cuando escarba recetas de las de antes y como sabe que me gustan, me las hace llegar por correo. Aquel día me llamó para hablar de negocios, pero acabamos hablando de cocina, como dos tontos aficionados a las cocinitas. 

Me contó su versión de un guiso de espárragos que me sonó a gloria y que yo interpreté a mi manera. Espero que se acerque a la suya o que al menos, le rinda homenaje, porque así lo voy a intentar. 
Gracias Antonio. Espero seguir recibiendo recetas así, porque son de las que sabes que me encantan y así intentaremos perpetuar esos platos de nuestras abuelas y conseguir que no desaparezcan. 

INGREDIENTES: 

Un par de manojos de espárragos verdes
Una Cebolla
Dos o tres dientes de Ajo
Cuatro o cinco Tomates seco
Cuatro cucharadas de salsa de tomate frito
Media cucharadita de Pimentón de la Vera ahumado
Un puñadito de Piñones
Una cucharada con colmo de Harina
Medio litro o algo más de Agua
100-150 ml de vino blanco
Sal
Huevos (Uno por comensal) 

ELABORACIÓN:

Primero cortaremos los espárragos, yo los corto por la última parte más dura, de modo que se queda todo lo duro por un lado (la parte más blanquinosa) y el resto, tierno, por otra parte. También separo las yemas, que las reservo para el final. 

Con los tronchos duros, preparo en la Thermomix el caldo que usaré para el guiso (esto es de mi cosecha, pero me encanta este caldo). Pare ello pongo un poquito de aceite, lo caliento y luego sofrío los tronchos triturando a velocidad 3. Cuando se han sofrito un par de minutos, añado medio litro de agua y los dejo hervir durante 7 u 8 minutos a 100º en velocidad 4. Por último trituro a velocidad 8 y cuelo. 

Si no tienes Thermomix o similar, puedes sofreír, un poco más picados a cuchillo, después cocer y por último triturar con la batidora. Quedará igual. 

Mientras todo esto se va haciendo (casi solo), voy haciendo el sofrito. Empiezo por la cebolla bien picada y el ajo. Luego pongo los espárragos cortados (las yemas las dejo para más tarde, porque al ser tan tiernas, se nos desharían en el guiso). Y luego echo unos trozos de tomates secos y los piñones. 

Cuando todo esto esté bien tierno, entonces echamos el tomate, el pimentón y la harina (sólo una buena cucharada sopera), que nos ayudará a espesar el guiso. 

Cuando la harina se haya tostado un poco y mezclado bien con el resto de ingredientes, es el momento de echar el vino, reducir un poquito y enseguida el caldo de los tronchos caliente, sólo lo justo para que cubra el sofrito y un poquito más. Lo tendremos casi media hora a fuego lento y dando vueltas con frecuencia, ya que al estar espeso el guiso, corremos el riesgo de que se nos pegue al fondo y se queme. A mitad del tiempo de cocción, incorporamos las yemas que teníamos reservadas. 

En el momento de ir a servirlo se deja pochar un huevo por comensal, y se sirve sobre un poco de la salsa. 

Por supuesto, no os tengo que decir lo buenísimo que está y que necesitaréis pan porque resulta imprescindible mojar, es imposible no hacerlo. 

Pues nada, lo dicho Antonio, si en algo he fallado ya me lo dirás, y si he acertado, gracias por tus aportaciones a mi "cultura de la cuchara". 

Os espero en la próxima. 

Mamen


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