Claro está, luego nos arrepentimos de esto y entonces buscamos la vuelta atrás. ¿Y ahora qué hago yo para perder lo encontrado? Hacer dieta!! Así pasamos de los excesos a los defectos. Y retiramos de un plumazo los dulces, el pan y los caprichosos bocaditos y aperitivos que picoteábamos estos días atrás.
Susi, nuestra dietista y nutricionista, nos propuso hace unos días una "dieta tipo" para reducir un poquito de peso en unos días. Más bien eran unas pautas para aprender a comer bien, creo yo. Y me sorprendió enormemente, que no retiraba el pan de la dieta, sino que aconsejaba un pan integral distribuido en trozos de unos 20 gramos en cada comida. Eso me animó, porque ya es costumbre, que comer sin pan es como tener un jardín sin flores.
Así que encaminada y convencida de que hay que cuidarse me lancé a estudiar un bocata para esta semana asequible a una dieta-tipo. No le he preguntado a Susi, pero supongo que si a lo largo del día junto todo el pan sugerido, podré comerme un bocata así en una de las 5 comidas recomendadas.
Menos mal, que Frialba tiene una variedad enorme de panes y nos han traido este panecillo integral, con una pinta espectacular y un sabor increíble. Vamos allá.
INGREDIENTES;
Panecillo integral
Unos 30 gs de lechugas variadas (hoja de roble, iceberg, rúcula..)
Tomate
Zanahoria rallada
AOVE
1/2 cucharadita de azúcar moreno
1 pizca de vinagre de módena
1 poquito de albahaca fresca
ELABORACIÓN:
Pensaba en el bocata todo lleno de verde y la verdad, no me atraía mucho. Porque no me gusta un relleno seco; prefiero algo jugoso y que dé gusto comérselo.
El pan era estupendo: Bocata integral, de doble fermentación, elaborado con harina integral, de corteza crujiente y miga esponjosa y con un ligero sabor ácido proveniente de los cereales seleccionados. Un sabor riquísimo, en comparación con otros panes integrales que había probado.
Hacer un bocata vegetal no tiene mucho misterio, pero que sea bueno... ya es otra cosa. No podía ponerle mayonesa o salsas que estropearan la dieta. Así que recordé un aliño, que aunque lleva un poquito de azúcar moreno, no iba a estropearlo. Es un poquito sólo y el azúcar moreno es más sana. ¿no?
Primero mezclar todas las lechugas, con la zanahoria rallada y con un par de tomatitos (estos eran especiales, porque son como cherri, pero morenos y buenísimos) troceados en un bol. Y le ponemos el aliño preparado con la pizquita de azúcar, unas gotas de vinagre de módena, un chorrito de AOVE (ya sabéis, que luego preguntáis Aceite de Oliva Virgen Extra) y, buscando que tuviera más salsa, le añadí un tomatito más rallado. El aliño me gusta ponerlo en un bote, cerrar y remover hasta emulsionarlo todo. Y una vez preparado el aliño, lo mezclamos bien con las verduras y rellenamos el pan.
No tiene más misterio; un buen pan y un buen aliño. Espero que os guste y que avancéis en vuestros propósitos con la #operacióntrikini.
ainsss no me digas que ya hay que empezar con la operación bikini o trikini, ay que aun no estoy mentalizada, aunque el bocata fenomenal, besos
ResponderEliminarEso quien lo necesite! el propósito empieza ahora, la dieta... ya es otra cosa! Gracias por pasar por aquí! Besos
EliminarLa Virgen!! Qué pinta!! (babas) jajaja Creo que lo voy a probar :P
ResponderEliminarPrueba, prueba... y luego me cuentas!! Besitos Blanca *.*
Eliminaruffff que buena pinta nada lo apuntaremos jejeej y empezaremos la dieta jajjaja un besito
ResponderEliminarSeguro que estando a dieta te apetece un montón un bocata... así que mejor uno así para luego no tener remordimientos... jejeje BEsos NAti
EliminarBuenísimo
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