jueves, 7 de marzo de 2013

POTAJE DE RELLENOS

En Semana Santa hay varias comidas típicas que se repiten año tras año. Casi todas las que recordamos son recetas dulces, como las torrijas, rollos fritos, panecicos dulces...  En mi casa los viernes se guardaba la Cuaresma, así como los días de la Semana Santa en los que no se debía comer carne. El bacalao era el rey de la mesa y se servía en varias versiones, marinado entre otras. Y una de las comidas que esperábamos con verdadera pasión era este potaje. 

Un potaje de verduras y legumbres que hemos rescatado de las recetas de antaño. Al que le hemos añadido bacalao; no sólo en el guiso sino también en los rellenos, que es lo que le da ese toque especial a esta comida: unos rellenos de pan y huevo que se empapan del caldo del guiso recogiendo todo el sabor y quedando jugosos y tiernos, mezclados con el resto. 

INGREDIENTES: 

PARA LOS RELLENOS: 

100 gs de pan duro rallado
3 huevos
50 gs de migas de bacalao desalado
un poco de perejil 
Aceite para freirlos

PARA EL GUISO

150 gs de espinacas frescas
un bote grande de garbanzos cocidos
80 gs de tomates secos
200 gs de bacalao desalado
una cebolla
una patata 
3 dientes de ajo
una cucharada de pimentón de la Vera
2 l de agua
sal
2 huevos cocidos

ELABORACIÓN: 

Preparamos los Rellenos con el pan rallado, las migas de bacalao y el perejil picado (podemos hacerlo en la Thermomix). Añadimos los huevos batidos y con la masa resultante vamos haciendo como si fueran croquetas con ayuda de dos cucharas, conformando los rellenos y echándolos en una sartén con bastante aceite (puede ser de girasol pero yo prefiero uno de oliva suave). Una vez fritos, con el fuego no demasiado fuerte para que no se "asorraten" y se queden bien hechos por dentro y por fuera, los apartamos a un plato con papel de cocina para que absorba el exceso de aceite. Reservamos.

Para preparar el guiso comenzamos por sofreír bien la cebolla picada y los ajos. Cuando esté dorada añadimos las espinacas crudas; bien lavadas y escurridas. Les damos una vuelta hasta que estén tiernas, añadimos los tomates secos un poco troceados y por último la cucharada de pimentón. Se sofríe con cuidado de no quemar el pimentón. 

Entonces ponemos el agua, los garbanzos y la patata "rota" (es decir, cortada sin pasar totalmente el cuchillo, sino sólo un poco y terminar rompiéndola en vez de cortarla). Llevamos a hervir durante unos 20 minutos. 

A los diez minutos de estar cociendo el guiso, le ponemos el bacalao.No hemos hablado de cómo desalar el bacalao. Yo uso para este guiso migas en lugar de lomos u otra versión de bacalao salado. Las migas necesitan menos tiempo para desalar, así que con ponerlas la tarde de antes es suficiente; es decir, de 12 a 16 horas cambiando dos o tres veces el agua. De hecho, si se ha desalado bien, podemos usar esta última agua de desalar para echarla al guiso, vigilando, eso sí que no lo sale demasiado. 

Y seguido pondremos el huevo cocido troceado y colocamos los rellenos por encima dejándolos cocer unos 8 o 10 minutos. O hasta que queden tiernos, vigilando que no se chupen todo el caldo o nos dejará el guiso demasiado seco. (Si esto ocurriera, se puede remediar poniendo un poco más de agua como último recurso y dejándolo hervir otro poco)

Y ya lo tenéis. Buenísimo y una comida bien completa no solo para la cuaresma, sino para cualquier época. 







martes, 5 de marzo de 2013

CANELONES DE COCIDO

Hace ya mucho tiempo que quiero preparar un buen post dedicado al cocido. Pero no llega el momento. Así que voy a empezar por otra parte. Os voy a enseñar cómo preparo estos canelones con la carne del cocido, y ya os contaré en otra ocasión cómo preparo yo mi cocido casero.
 
Os puedo adelantar que mi cocido es bastante completo; suelo poner  pollo y/o gallina y/o pavo. Además algo de cerdo y un hueso con algo de carne de ternera. Un buen trozo y hueso de jamón. Sus morcillas correspondientes y su "pelota" de carne picada. Las verduras y los garbanzos. Pero hemos quedado que este post era de canelones, no de cocido... Ese ya os lo contaré otro día. Pronto.
 
Normalmente utilizo la parte de la gallina o el pollo y el jamón para hacer croquetas, pero con estos cocidos tan grandes , sale mucho arreglo de carne, de la  que no desaprovechamos nada. Muy al contrario, sacamos varias comidas diferentes con ella.
 
Bueno, no os doy más vueltas y os cuento, porque es una receta fácil; un poco entretenida, pero fácil.
 
 
 
INGREDIENTES:
 
200 g de restos de carne de cocido
Una cebolla
Un bote de tomate frito
Una lata de foie gras
Un paquete de canelones (de los que no necesitan cocción)
Queso Mozzarella
Queso rallado para fundir tipo Enmental
Para la BECHAMEL:
750 ml de leche
110 g de harina
50 g de mantequilla
1 cucharada de AOVE
4 cucharadas de tomate frito
1/2 cebolla
nuez moscada, pimienta y sal.
 
ELABORACIÓN:
 
Podemos ir preparando la Bechamel a la vez que el relleno, si tenemos la suerte de tener Thermomix o Thermochef. Yo varío un poco la receta del libro, porque me gusta poner al principio un poco de cebolla a freir y sofreír también la harina. Pero para los que no tenéis alguna de estas máquinas, hacer una bechamel casera no cuesta nada; os explico.
 
BECHAMEL:
 
Ponemos en una cacerola el aceite y la mantequilla. Sofreímos la cebolla picada lo más fina posible, incluso a veces la paso por la batidora para que quede completamente desecha. Cuando esté dorada o transparente, ponemos la harina y la doramos también, entonces iremos añadiendo la leche, mejor un poco caliente. Y sin dejar de remover hasta que espese bien... unos 7 o diez minutos. Entonces añadimos la nuez moscada, la sal y la pimienta. Y el tomate frito. Me gusta que quede un poco rosita.
 
RELLENO CANELONES:
 
Para preparar el relleno de los canelones, picamos la carne con ayuda de unas tijeras para que no quede hecha "puré", sino que se vean los trocitos de carne.
 
Empezamos por poner a pochar la cebolla, una grandota. Luego añadimos la carne y la revolvemos bien. El foie gras y el tomate al final. Todo este preparado lo dejamos templar un poquito.
 
Las placas de canelones o lasaña ya precocidas, no necesitan cocerse y me resultan mucho más fácil de preparar que las que hay que cocer aparte. Sólo meterlas a remojo o seguir las instrucciones del fabricante.
 
 
 
Yo pongo las placas, una vez remojadas, en unos paños extendidas y voy echando una cucharada del relleno en cada canelón y un poquito de mozzarella en cada uno. Cuando ya los tengo todos voy liando uno a uno y colocando sobre una llanda de horno en la que previamente hemos puesto una capa de bechamel en el fondo. Una vez colocadas todas se cubren con el resto de la bechamel, queso rallado y se meten en el horno precalentado a 200º durante unos 10-15 minutos, con el grill puesto.
 
De la misma manera que los canelones, podemos hacer lasaña... alternando capas de pasta y capas de carne. Pero el relleno es el mismo.   
 
 















 

viernes, 1 de marzo de 2013

HAMBURGUESA DOS ROMBOS

Para este viernes hemos estado elaborando una hamburguesa especial. Que ya tenía yo ganas de hamburguesa en mis bocatas.
 
Esta es especial porque no es de cerdo, ni tenera, ni pavo ni "caballo"... es de cordero. Especialmente de cordero manchego, que es bien bien bueno.
 
¿Y lo de "dos rombos"? os estaréis preguntando... Bueno, pues no penséis mal, que sólo viene a cuento por el pan. Que es un panecillo en forma de rombo superbueno. Ideal el tamaño para una hamburguesa. Nada más verlo, supe que era para ello.
 
El panecillo Rombo que nos trae hoy Frialba es un panecillo rústico de corteza crujiente y miga densa y muy sabrosa.  Elaborado con harinas de primerísima calidad, lo que permite disfrutar de una panecillo estupendo para cualquier bocadillo o como acompañamiento para cualquier comida.
 
El bocata en sí no tiene ningún misterio, sólo que hemos puesto un revuelto y una carne. Un primero y un segundo juntos entre el pan.
 
Sólo espero que os guste. Es especial... ¿Lo he dicho ya?
 
INGREDIENTES:
 
Para la hamburguesa:
1/2 kg. de carne de cordero
100 gs de pistachos
1 Cucharada de mostaza antigua
2 Cucharadas de mostaza normal
100 ml de cerveza
1 y 1/2 rebanadas de pan (sólo la miga)
Sal
Pimienta
 
 
 
 
 
Para el revuelto:
Ajetes tiernos
Tomates secos
Huevo
Sal
Un chorreón de AOVE (aceite de oliva, que luego preguntáis)
Panecillos
Y unas cuñas de Queso manchego
 
ELABORACIÓN:
 
Un día antes prepararemos las hamburguesas. Deshuesamos y picamos la carne de cordero (yo lo hice en la Thermomix) Y salpimentamos. Después iremos añadiendo los pistachos bien picados y las mostazas. Luego mojamos el pan en la cerveza hasta que se empape bien y lo añadimos a la carne.
 
Removemos bien toda la mezcla y dejamos en la nevera tapada con papel film hasta el día siguiente que vamos conformando las hamburguesas. Yo las hice en forma de rombo para que encajaran perfectamente en los panecillos. Pero vamos, las podéis hacer como queráis. Ya sabéis; en la sartén fuertecillo al principio para que se sellen bien y luego bajáis el fuego para que se hagan bien por dentro.
 
Para preparar el revuelto tampoco hay mucho misterio: Primero sofreímos los ajetes. Cortamos a trocitos los tomates secos y les damos una vuelta con los ajos cuando ya estén tiernos. Apartamos.
 
En ese aceite, echamos el huevo, un poco de los ajetes y tomates, sal y damos vueltas. Que quede tierno pero no pasado.
 
Colocamos el revuelto sobre la hamburguesa y si queremos, podemos ponerle un par de cuñas de queso manchego, que le va ideal y así todo de la Mancha (haciendo patria).